Ya estamos otro año más en Navidad, terminándose casi el período de adviento y adentrándonos en la Cena de Nochebuena. Tengo que reconocer que a mi la Navidad me encanta, desde pequeñita la he disfrutado enormemente siempre rodeada de mucha gente, niños y mucha comida.
Para mi la Navidad casi casi empieza el día de la Lotería, el 22 de Diciembre, siempre con mucha Suerte, pues la salud sigue acompañándonos, y este año con un pellizquito que me vendrá genial para hacer algún regalito o autoregalo ;-), luego llega el 23 que es el día en standby con un poco de nervios e ilusión pensando en los encuentros del día 24, y si te toca cocinar, pensar en el menú que prepararás. Mi pueblo es un pueblo tranquilo, a veces demasiado tranquilo, pero no se que pasa el 24 de Diciembre que las calles huelen diferente, y a partir de las 8 de la tarde, tabernas y bares se llenan de vecinos y gente que vuelven
a casa por Navidad. Sobre las 10 de la noche, las familias se juntan para cenar y celebrar así la Cena de Noche Buena, con villancicos, con sidra, con cava, turrones y polvorones y algún regalito que pueda llegar esa misma noche. Ya, a altas horas de la madrugada, los que no estén cansados ni tengan mucho sueño pueden salir a tomar algo a los dos bares del pueblo, que habrá música y copas hasta el amanecer. Pero...todo pasa...y de repente ya es 25 de Diciembre, vuelve la tranquilidad al pueblo, las familias comen juntas y brindan por la Navidad.
En estas fechas, amigos, primos y primas, compañerosss...aprovechamos para juntarnos, comer o cenar, y compartir un rato agradable, disfruntando de la compañía de gente que a lo mejor sólo vemos en Navidad.
Y siete días después, ya estaremos en el último día del año, 31 de Diciembre, haciendo balance de todo lo que hemos hecho durante todo este año y de aquello que teníamos pensado pero no llegamos a hacer, y pensando ya en los propósitos para el nuevo año que va a comenzar. Así como el 24 y 25, son días familiares (sobre todo para los que somos creyentes) el 31 es un día de fiesta, asique yo ultimamente celebro esa noche con amigos y amigas, sin olvidarnos de las tradicionales 12 uvas de la suerte.
...y de repente nos encontramos con el Nuevo Año, el día 1 de Enero, un día un poco nostálgico, parece que como si los brillos de la noche anterior se hubiesen apagado de golpe, en la tv repiten programas que veias mientras cenabas el 31, pero...eso ya pasó, y así de repente estamos en Enero de un año más.
A estas alturas ya poco queda de Navidad, sólo la Noche de Reyes, la noche más esperada del año para todos los inocentes, pueblos y ciudades se llenan de niños para esperar la llegada de Sus Majestades los Reyes Magos, llegados de Oriente, cargados de paquetes y regalos para repartir en todas las casas durante toda lo noche. Pasa a ser la primera noche especial del año, sobre todo para los más peques sin olvidar que todos llevamos un poco de inocencia en nuestro corazón, por eso te pregunto...has escrito ya la carta a los Reyes? apura que ya queda menos...yo sí!!!
Desde este rinconcito os deseo Felices Fiestas Navideñas y lo mejor de lo mejor para el próximo Año Nuevo 2016!!!
Bo Nadal e FelizAninovo!!!
Merry Christmas e Happy New Year!!!
Galicia es conocida por sus rías, altas y baixas, por sus montañas, O Caurel y Os Ancares, por sus playas As Catedrais e A Lanzada, por su Costa da Morte, por el camino de Santiago y por un millón de cosas más, entre ellas, las fiestas gastronómicas, casi todos los fines de semana de pueblo en pueblo hay una fiesta gastronómica en la que poder desgustar alguna comida o vino de la zona en la que nos encontremos.
En esta ocasión, voy a contaros mi experiencia en la Festa do Albariño de Cambados. Se trata de una fiesta de Interés Turístico Nacional, que ya va por 63 ediciones y ya están preparando la 64 edición que se celebrará el primer fin de semana del mes de agosto.
Cambados se viste de gala cada primer fin de semana del mes agosto, su alameda se llena de stands y expositores con la más grande variedad de vinos con denominación de origen Albariño, desde la bodega Eidos (que este año era la que se encontraba en la primera posición), pasando por Martín Códax, Condes de Albarei, Pazo Señorans (entre las más conocidas) o Paco y Lola (la más divertida). Cuando llegas a la fiesta o feira, lo primero que tienes que hacer para mimatizarte en la fiesta es comprar una copa de cristal, colocarle un cordón y colgártelo al pescuezo, y a partir de ahí ya estás listo para comenzar a pasártelo genial. Te aconsejo que no visites todos los stands, sino la resaca puede ser mortífera, elige los que más te llamen la atención, pues tratándose de Albariño todos estarán buenos y ten en cuenta que puedes pedir por copa o por botella, asique lo mejor es que te busques unos amiguitos y compartais botella (sale más económico).
Si tienes hambre, también hay unos puestecitos para comprar comida típica gallega, empanada de carne, de atún, de zamburiñas, de xoubiñas...pulpo a feira con cachelos o bocata de calamares.
Ya con el buche lleno, de comida y albariño, estais preparados para bailar toda la noche en las orquestas y conciertos que hay en la Plaza de Feciñans y disfrutar da Festa do Albariño.
P.D.: totalmente recomendable, y ya que vienes quédate un par de días más y disfruta de las Rías Baixas.
España limita con dos países, bueno tres, uno de ellos linda con mi Comunidad, Portugal que debe su nombre a Porto de Galicia, concretamente mi ciudad Pontevedra se encuentra tan sólo a unos 55 Km que en autopista se traduce en media hora.
En cuanto pasamos la frontera, por encima del Río Miño, río que por cierto nace en Meira y desemboca entre La Guardia y Caminha, llegamos a Valença do Miño, aquí podemos subir a la fortaleza y callejear por el empedrado viendo las tiendecitas y puestos de mercado que hay a lo largo de la calle y reponer fuerzas con un cafecito rico en la terraza del parador.
Dejamos Valença, y seguimos dirección Monçao, si vais a la hora de comer, no dejeis de ir al mejor italiano del Norte de la Península, el Mangiari di Roma, y probad la gran variedad de pizzas y postres italianos, están buenísimossss.
Si este viajecito lo haceis un sábado, podeis aprovechar para ir al mercadillo de Vilanova da Cerveira, es enorme y dura casi todo el día, os da tiempo a verlo, coger fuerzas con un buen Bacallao a Brasa y continuar rastreando en el mercadillo.
Continuamos por la A3 dirección Oporto, si quereis podeis hacer una paradita en Braga, tengo que reconocer que yo aún no he ido (visita pendiente y con muchas ganas), y rápidamente llegamos a Oporto o como dicen los portugueses simplemente Porto.
Podemos empezar el recorrido desde a Praça da Batalla, (si os vais a quedar a dormir, allí mismo hay un hotelito supercuco, con parking y bastante económico que se llama B&B, yo ya he ido dos veces y me encanta) y comenzar a caminar por la larga avenida Via Catarina llena de tiendas de todo tipo. Al final de Via Catarina, hacemos como una "L" hacia la izquierda y comenzamos a bajar hasta llegar a la Plaza de la Libertad (una de las bonitas de la ciudad), desde allí subimos hasta la iglesia de Clérigos y hasta la famosa librería más antigua de Oporto (donde dicen que se han grabado algunas escenas de Harry Poter).
Callejeando hacia arriba y hacia abajo podemos ver azulejos por casi todos los edificios de la ciudad (símbolo de Portugal) y especialmente en la bonita estación de tren San Bento, desde allí se baja hacia la Ribera do Rio Duoro, una vez allí, se puede tomar un vinito de Porto viendo toda la ribera, la ciudad de Gaia que se encuentra en frente con todas sus bodeguitas, el puente de Don Luis, los barquitos que te llevan a dar paseos por el río o el teleférico que te sube hasta el cementerio.
Subiendo hacia el centro no dejeis de visitar la Bolsa de Oporto, es un edificio bastante emblemático y singular, y a sus pies nos encontramos la pizzería Commercial donde poder tomar una comida italiana buenísima, (totalmente recomendable), eso sí, no debeis marchar de Oporto sin probar las típicas Françesinha (están buenísimas).
Dejamos Oporto y seguimos adentrándonos en el corazón de Portugal, pasando por Figueira da Foz, Coimbra, Nazaret hasta llegar a la Capital, "Lisboa". Para mi Lisboa es un Oporto en grande, he estado en dos ocasiones, me parece una de las ciudades más románticas de Europa, desde o Barrio Alto da cidade hasta Belén. Si vais a Lisboa, teneis que callejear calle arriba calle abajo descubriendo lugares como
Café a Brasileira (lugar mítico para tomar café y escuchar fados en directo), el Elevador de Santa Justa (es un ascensor que une o Barrio Baixo con el Chiado), pasear por la Plaça do Comercio y desde allí coger un travía que os lleve hasta la Torre de Belén y el Monasterio de los Jerónimos, no os marcheis de Belén sin probar las famosas "natas" (dulce típico de Portugal, y especialmente los de Belén).
Cerca de Lisboa podeis acercaros por la Costa hasta Estoril y visitar el Casino (es el casino más antiguo y famoso de Portugal), muy cerquita de Estoril se encuentra Cascais (pueblecito típico de veraneo portugués con casitas blancas, parecido por su cercanía a los pueblos blancos andaluces). Ya para terminar mi periplo por Portugal, mi siguiente parada fue Sintra, Sintra es famoso y conocido por su gran variedad de Castillos y Palacios, (consejo: lleváte unas buenas zapas pues te cansarás de subir y bajar cuestas y escaleras encantadas).
...aquí se acaba mi paseo por Portugal, pienso volver, pronto...boa viagem
